La Protección Solar

2022-02-10T10:12:12-05:00

Nadie pone en duda que el sol es imprescindible para que haya vida en la Tierra, al mismo tiempo que todo el mundo asegura que un exceso de sol sin protección solar puede tener efectos muy nocivos para las personas.

La sociedad actual asimila bronceado con salud, y no siempre están relacionados.

El SOL

La luz solar nos proporciona efectos fisiológicos positivos:

  • Estimula la síntesis de vitamina D (la cual previene el raquitismo y la osteoporosis).
  • Da la sensación de salud y bienestar, tiene un efecto estimulante sobre nuestro cerebro.
  • Actúa positivamente en patologías cutáneas como la psoriasis o la dermatitis atópica.
  • Incluso, en algunos casos estimula la síntesis de los neurotransmisores cerebrales responsables del estado anímico (quizá por eso se relacionan los países cálidos con la alegría y la juerga y los países fríos con la seriedad y la depresión).

Pero lo que resulta claro es que actualmente hay que sopesar las ventajas y los inconvenientes que tiene una exposición excesiva al sol sin protección.

¿Cuáles son los EFECTOS SECUNDARIOS de las radiaciones solares?

El sol emite una sucesión de partículas energéticas: los fotones. El fotón, en su vibración y desplazamiento, crea una onda. La longitud de onda es la distancia que separa dos máximos y su unidad es el nanómetro = 1/1.000.000.000 m.

La luz solar se descompone en diversas longitudes de onda, de las cuales tres llegan al planeta Tierra: UV, IR y Visible.

La energía de estas radiaciones es inversamente proporcional a su longitud de onda. Es decir: cuanto más corta es esta longitud más energía tiene.

TIPOS DE RADIACIONES

Ultravioleta (efecto biológico): según su longitud de onda, podemos distinguir tres grandes zonas de radiaciones ultravioletas:

  • UVC: entre 200 y 280 nm. No llegan a la superficie de la Tierra. Son muy peligrosas para el hombre y las absorbe la capa de ozono de la atmósfera.
  • UVB: entre 280 y 320 nm. Son muy energéticas y responsables de las quemaduras en la piel. Penetran a nivel epidérmico y son las responsables del bronceado a largo término. Son capaces de alterar el DNA de las células y producen cáncer de piel. Son más intensas en verano.
  • UVA: entre 320 y 400 nm. Entre el 30 y el 50% de estos rayos llegan a niveles profundos de la dermis y, aunque tienen menor energía son tan perjudiciales como los UVB. Aceleran el envejecimiento de la piel, inducen a la aparición de manchas y bronceado y son las responsables de las alergias al sol. Pueden producir problemas en los ojos y, a largo término, también producen cáncer de piel.

Visible (efecto luminoso): penetran hasta la dermis. Producen envejecimiento prematuro y manchas.

Infrarroja (efecto calorífico): penetran hasta la hipodermis. Es la responsable del golpe de calor y la insolación. Aumentan el fotoenvejecimiento y la degradación del colágeno. Provoca alteraciones en el ADN celular.

Si hemos dicho que cuanto más corta es la onda más intensa es la energía, los rayos UVC son los más energéticos, pero los detiene la capa de ozono, situada a unos 30 km de distancia de la Tierra. Si bien es cierto que los UVC no llegan a la superficie terrestre, todos sabemos que la capa de ozono está seriamente amenazada por las emisiones de CFC y que la tendencia general observada es de una disminución del 0,5% anual. Una razón más para ir con mucho cuidado con el sol.

FACTORES que influyen en la acción de la exposición solar

  • Altitud. La intensidad de las radiaciones es más elevada cuanto mayor es la altitud. Hay un 4% más de radiaciones cada 300 metros.
  • Oblicuidad. Se recibe diferente intensidad según el ángulo de incidencia sobre la superficie terrestre.
  • Latitud. En una misma estación hay diferente oblicuidad de los rayos solares.
    En los trópicos el sol se encuentra próximo a la verticalidad y, por lo tanto, las radiaciones son más intensas.
  • Estación. La manera como incide el sol se modifica a lo largo del año.
  • Clima. Las nubes y la humedad absorben las radiaciones. Esto no significa que los días nublados no tengamos que protegernos, las radiaciones llegan en menor cantidad pero llegan.
  • Superficie. Parte de la radiación solar es absorvida por la superfície, la otra parte es reflectante. La reflexión varía según la superficie: en nieve es del 85%, en arena seca del 17%, en agua del 5%, en hierba del 3% y en asfalto del 2%.
  • Contaminación. La contaminación, aunque poco, reduce la incidencia de la radiación UV.
  • Capa de ozono. La pérdida de la capa de ozono es una amenaza para el aumento de las radiaciones.

Índice UV Solar Mundial

El índice UV Solar Mundial representa una estimación del promedio de la radiación ultravioleta (UV) solar máxima en la superficie de la Tierra. Aunque la intensidad de la radiación UV que llega a ras de suelo varía a lo largo del día, tiene el valor más alto al mediodía y en ausencia de nubes.

El cálculo de este índice permite valorar el grado de nocividad para la piel según las distintas longitudes de onda UV, y hace el promedio de las variaciones de la radiación por periodos de 10 a 30 minutos.

Se acostumbra a expresar como una predicción de la cantidad máxima de radiación UV perjudicial para la piel que incidirá en la superficie de la Tierra al mediodía solar. Los valores que adopta van de cero hacia arriba, y cuanto más alto es el índice, más alta será la probabilidad de que la exposición a los rayos UV perjudique a la piel y a los ojos, y menor el tiempo que tardará en provocarlo.

En muchos países próximos al ecuador, el índice UV puede llegar al valor 20 durante el verano. En Europa, el índice no acostumbra a superar el 8, aunque en las playas acostumbra a ser más alto.

El índice UV se subdivide en:

  • exposición baja (entre 1 y 2)
  • exposición intermedia (entre 3 y 5)
  • exposición alta (entre 6 y 7)
  • exposición muy alta (entre 8 y 10)
  • exposición extrema (superior a 10)

¿Qué es el FPS (Factor de Protección Solar)?

Éste es un elemento que se asocia indefectiblemente con los productos de cosmética solar y que a menudo no se interpreta correctamente.

  • Físicamente el FPS es un número que indica cuál es el múltiplo de tiempo al que se puede exponer la piel protegida para conseguir el mismo efecto eritematoso que se obtendría si no se hubiese aplicado ninguna protección. De esta manera se evita el eritema, en comparación con el mismo tiempo de exposición pero sin la protección del filtro solar. solo da información de la protección frente al UVB.

Por ejemplo: si una persona puede exponerse al sol el primer día 10 minutos sin tener enrojecimiento ni quemaduras, un FPS 15 utilizado adecuadamente la protegerá del sol durante 150 minutos (10×15), aunque no es tan preciso, porque hay muchas variables que influyen.

  • Cada persona tiene que saber su especial sensibilidad a la exposición solar y saber el tiempo que se puede exponer al sol sin riesgo de quemaduras. Hay que tener en cuenta el Fototipo, si se toma medicación fotosensible y los factores de riesgo de cáncer de piel.

Hay que recordar pues que todas las medidas para protegernos del sol son pocas.

Fuente: farmaceutico on line